Viajaban de uno a otro monasterio un monje y una monja. Hacia
mucho calor. Al pasar por un arroyo, la monja se despojo del habito, se quedo
completamente desnuda y empezo a refrescarse con el agua. Entonces el monje, trubado, se giro dandole la espalda.
La monja pregunto:
Todavia tienes eso en la mente?