El consejo del maestro

Era un noble que se veia obligado a pasar mucho tiempo recibiendo visitas y atendiendo el protocolo.

Todo ello era bastante rutinario y repetitivo y por eso los dias se le hacian insoportablemente largos.

Un dia el noble recurrio a un maestro sabio para contarle lo que le sucedia y pedirle consejo. Con parsimonia, el maestro escribio en caracteres chinos en una hoja en blanco y luego se la entrego al noble.

Cuando el noble leyo los caracteres, he aqui lo que decian:

Este dia nunca volvera; cada instante es precioso y vale mas que la mejor de las joyas.

Nunca el noble olvido esta instruccion.

La desnudez

Viajaban de uno a otro monasterio un monje y una monja. Hacia

mucho calor. Al pasar por un arroyo, la monja se despojo del habito, se quedo

completamente desnuda y empezo a refrescarse con el agua. Entonces el monje, trubado, se giro dandole la espalda.

La monja pregunto:

Todavia tienes eso en la mente?

El Problema

EL discipulo acudio a su mestro al amanecer y le dijo:
-Respetado maestro, necesito exponerte un problema.
-Ahora no puedo; hazlo luego.
Al llegar la noche, estaban todos los monjes reunidos y el maestro dijo:
-Alguno de vosotros tenia un problema, no es asi?
EL discipulo se adelanto y dijo:
-Era yo, señor.
-Pues si has podido cargarlo tantas horas, no era un gran problema.
Ahora todos a meditar y luego a dormir.