ANSIEDAD

Ansiedad.

Sintomas de la ansiedad

Puede que en algún momento hayas sentido que tus emociones te desbordan, que afectan tu estado mental y tu bienestar físico. Y que estas emociones aparezcan a veces sin causa aparente afectando tu vida en general. Estas emociones que afectan el plano físico y mental pueden estar siendo ocasionadas por la ansiedad.

Cómo detectar la ansiedad.

Se puede escribir una lista larga de factores que ayudarían en la detección de la ansiedad como ser: un mal ambiente de trabajo, problemas personales, las obligaciones familiares, el receso de actividades, los compromisos horarios entre otros factores. Pero que estos ambientes o cambios en la vida cotidiana influyan negativamente en nuestra vida generando un estado de ansiedad está íntimamente ligado al carácter particular que tiene cada persona y el modo de enfrentar la vida.

Una persona que se toma las cosas demasiado en serio, siendo muy exigente en todo lo que hace, que  da demasiadas vueltas a los problemas que tiene, y no se  permite un tiempo para relajarse ni desconectarse,  es una persona candidata a tener ansiedad.

Los síntomas que se pueden presentar son variados y varían en cada persona. Estos pueden ser desde una sensación de angustia en el estómago, hasta el pánico incontrolado. Es bueno estar atentos a nuestras sensaciones para poder identificar a la ansiedad y controlar que ésta no afecte nuestro bienestar. Es fundamental buscar herramientas para controlarla y recuperar el control de nuestra vida.

A qué llamamos ansiedad?

 

Que es la ansiedad
A qué llamamos ansiedad?

 

 

 

 

 

Describimos a la ansiedad como un trastorno de la mente. La persona hace una interpretación de la realidad basada en patrones de conducta que son determinados; por ejemplo la creencia: cuando no nos creemos capaces de superar una situación.

La ansiedad tiene varias fases:

Primera fase:

Es una ansiedad leve:

No existen reacciones fisiológicas  importantes, los síntomas que encontramos pueden asociarse al estrés, por ejemplo: sensación de angustia en el estómago, tensión muscular,  cefalea, cansancio, insomnio, y también irritabilidad.

Segunda fase:

Esta es una fase que las reacciones fisiológicas se evidencian en momentos de tensión. A los demás síntomas anteriores, vamos a añadirle dificultad para respirar, arritmia, mareo, orina excesiva, tartamudeo, temblores en la mano, y también incoherencia mental.

En esta etapa, aún se logra mantener el control de la situación, y una vez que pasan estos momentos de tensión no se vuelven a pensar en ellos.

Tercera fase, las crisis de ansiedad:

Esta es una fase en la cual la reacciones físicas dejan de estar bajo nuestro control. Nos encontramos pensando mucho en los momentos de tensión, y los esperamos con preocupación.

Tan sólo pensar en la situación, ya se presentan los síntomas físicos, como por ejemplo: mareo, sudor, entre otros.

Llegando al momento de máxima tensión se pierde el control del cuerpo, y también la capacidad de pensar coherentemente, y esto suele suceder por la hiperventilación.

Y ya estamos en lo que se llama una crisis de ansiedad.

Cuarta fase:  estamos en una ansiedad extrema.

Ya se pierde el control total de la situación, también Incluso en los momentos de reposo. La sensación profunda de pánico nos impide por completo hacer una vida normal.

Estos síntomas físicos los interpretamos como señales de peligro, lo que hace que nuestra mente se sitúa en un estado constante de angustia.

Tanto el cuerpo como la mente se encuentran en estado de shock.

Esta es una fase que para volver atrás cuesta mucho y lleva  tiempo, y además pueden llegar a quedar secuelas.

Pasos a seguir.

Cuando reconocemos en qué fase nos encontramos tenemos que preguntarnos hacia donde queremos ir. Aunque esta respuesta sea obvia, es necesario tener en cuenta que al contestarla, tomamos la decisión real de hacernos responsables de nuestros problemas. Lo siguiente entonces sería conocer cuáles son los obstáculos que vamos a encontrar en nuestro camino al equilibrio.

Los obstáculos pueden ser:

Externos:

Son los obstáculos que no podemos controlar y le vamos a echar la culpa a nuestra sociedad. Estos parecen ser muy evidentes y también el motivo detonante pero tenemos que tener claro que no son los responsables.  Refiriendo a los acontecimientos que se relacionan con aspectos de nuestra vida y alrededores podemos nombrar los siguientes: los hijos, los vecinos, la pareja, el trabajo, el  tráfico, los políticos, las obligaciones del gobierno, las crisis, y la lista puede seguir indefinidamente.

Si bien todos estos factores son reales es necesario reconocer que lo que nos causa la ansiedad, no son estos factores, si no los pensamientos que proyectamos sobre ellos.

 

 internos:

Me dominan los pensamientos
Soy dominado por mis pensamientos

 

 

 

 

Los obstáculos internos son los únicos que podemos controlar, aunque de manera inconsciente dejamos que ellos nos dominen en un 90% de nuestras acciones.

Nos estamos refiriendo a los pensamientos.

Esos pensamientos en realidad son los causantes de la ansiedad y de cualquier estado de las emociones.

Dichos pensamientos se convierten en emociones y presentan síntomas físicos.

Cada uno somos lo que pensamos, y el mundo que vemos y sentimos, es de acuerdo a nuestro propios pensamientos.

En el caso de la ansiedad, la depresión, y muchos otros desórdenes qué son emocionales, tenemos que conseguir reestructurar nuestra forma de pensar y de sentir y de cómo percibimos el mundo que nos rodea, ahí está la clave principal.

Por dónde empezar si tienes ansiedad?

Para comenzar seria conveniente evitar la televisión en las noches. Tampoco ver noticias de los periódicos, escuchar la radio, Internet, los videojuegos, y las películas que son agresivas.

Tendremos que evitar el café, la Coca Cola, el té, bebidas que son azucaradas, las tonificantes, bebidas light, el chocolate y el azúcar.

Es muy beneficioso poder tener una vida saludable, cuidar que nuestras comidas sean sanas y también mantener nuestro cuerpo activo.

Hacer deporte es muy importante pero si no fuera posible, quiero que consideres al menos caminar 20 o 30 minutos para después ir aumentando hasta llegar a una hora. El ejercicio ayuda para eliminar las toxinas, mejorar la circulación sanguínea, te fortalece, y después de  realizarlo te sentirás mucho mejor.

Uno de los puntos claves es la respiración para controlar las crisis de  ansiedad. Para ello un método que puedes utilizar diariamente en tu hogar es tumbarte boca arriba en el piso sobre una colchoneta o frazada, concentrándote en la respiración.  Puedes colocar tus manos sobre el abdomen y guiar tu atención hacia el abdomen mientras que respiras cada vez más profundo. Para ello puedes buscar música que sea relajante.  Sin embargo, si sientes que es difícil lograr la relajación considera alguna Meditación guiada.  En  Internet podrás encontrar varias opciones.

Lo que el Chi Kung puede brindarte.

Mediante el Chi Kung armonizamos nuestra energía, la respiración es profunda logrando un estado general de calma mental y emocional.

Cada uno debe discernir qué tipo de terapia le sienta mejor ya sea psicoterapia, naturopatía, acupuntura, masaje relajante, tai chi, chi Kung o yoga.

Sin embargo si tienes ansiedad en etapa avanzada es aconsejable consultar a un especialista médico.

 

 

COMO COMBATIR EL ESTRÉS

Control del estrés.

Controlando tu chi podras dominar el estres
Como controlar el estres en estos tiempos

¿Alguna vez has tenido dificultades para dormir, o has sentido que la ansiedad te domina? Evidentemente el estrés es responsable de los mayores problemas que sufre nuestra salud tanto a nivel físico como emocional. No es casualidad que los  medicamentos que más se prescriben a nivel mundial son para combatir  la úlcera, la hipertensión y la ansiedad. Todas ellas dolencias causadas por el estrés.

Esto nos da una clara idea del efecto destructivo contra la salud que ocasiona el estrés.

El estrés causa un amplio espectro de enfermedades tanto físicas como emocionales y además puede afectar la acción diaria de la persona aunque esté sana.

La práctica del Chi Kung.

chi kung clases
Siente la libertad al practicar chi kung

La práctica del Chi Kung es un excelente medio para controlar el estrés. La práctica continua no solo mejora la salud física sino también la salud emocional. Es por ello que los practicantes de Chi Kung pueden mantenerse serenos frente a situaciones límites, lo que permite que puedan tomar mejores decisiones teniendo un mayor control de su vida.

Al practicar Chi Kung nos despediremos del estrés, tanto así que podremos trabajar con más eficiencia, controlar nuestras emociones y poder así liberarnos de los desórdenes físicos y mentales relacionados con el estrés. Nuestra vida se ve enriquecida consiguiendo mayor estabilidad emocional y el desarrollo interior.

El estrés,  las enfermedades mentales y la estabilidad emocional.

Enfermedades mentales
El chi kung en la salud mental

La medicina china a profundizado en gran medida en psicología y psiquiatría.
Curiosamente y a diferencia de la medicina occidental, en la medicina china no hay separación de la psiquiatría como especialidad de la profesión. Cuerpo y mente son entendidos como una unidad, no separando la enfermedad mental de la física.

Si la mente no es estimulada,
si no son curados los pensamientos y los sentimientos,
no existe la recuperación del paciente.

Si el profesional médico sólo prestara atención a los factores que son patológicos y fisiológicos dejando de lado el aspecto psicológico y psiquiátrico, el paciente no podrá curarse.

Cómo afectan a nuestro cuerpo las emociones negativas.

Manejo de emociones
El chi kung en el manejo de las emociones

La causa de los desordenes emocionales es la ausencia de armonía en el Chi (energía).

Si por mucho tiempo tenemos falta de armonía del Chi esto causará enfermedades orgánicas afectando a los órganos respectivos y además trastornos emocionales.

Si el flujo de Chi es inadecuado para eliminar los desechos tóxicos de la mente se producirán trastornos neurológicos.

Por un parte, si una persona se siente contenta, su energía circulará bien por los canales. Por el contrario,  cuando existe un exceso o merma la alegría,  esto generará una dispersión de el Chi.

Cuando una persona se enoja el Chi se concentra en la cabeza.
La tristeza hace que se debilite el Chi.
El tener miedo lo sumerge.

Existen siete emociones que son responsables de las enfermedades emocionales que provocan desordenes físicos en nuestros órganismo:

  1. La alegría (La falta de esta es perjudicial para el corazón.)
  2. La rabia (El hígado)
  3. La ansiedad(Los pulmones)
  4. La preocupación(El bazo)
  5. La tristeza(pulmones)
  6. El miedo(Los riñones)
  7. Las conmociones(Los riñones)

Una persona que se encuentra triste sentirá debilidad en sus pulmones y estará expuesta a enfermedades de dicho órgano. En tanto las personas que se enojan con facilidad corren riesgo de sufrir hipertensión o alguna enfermedad concerniente al corazón. La ansiedad puede causar trastornos digestivos mientras que el miedo provocaría el descontrol de los esfínteres.

En nuestro interior surgen las emociones negativas y el poder controlarlas depende de el nivel de armonía del Chi que habita en cada persona.

El practicante de  Chi Kung que cuenta con un Chi armónico no verá tan afectada su salud debido a que puede ser consciente de esta energía negativa y expulsarla fuera de su organismo.

En medida que avancemos en nuestro entrenamiento, la cantidad de Chi aumentara y el flujo será mas ágil, volviéndonos cada vez mas emocionalmente estables y fuertes, siendo capaces de tolerar la ansiedad, el enojo , las angustias, las agresiones y demás emociones que  pueden llegar a destruir a otras personas.

Por lo tanto y sin lugar a dudas el Chi Kung es un ejercicio excelente para desbloquear la energía y controlar las emociones para tener una mente y cuerpo sano.

Practicar chi kung o qi gong
Comprueba los beneficios que tiene para la salud la practica de chi kung .

Te invito a experimentarlo por ti mismo.